Gijsbert Hanekroot
Desde Abba hasta Zappa
Por Laura Martinez
All photos: ©Gijsbert Hannekroot / Cortesía MONDO GALERIA
Hoy vas a cualquier concierto y siempre es fácil ver a uno o dos cámaras a pie de escenario capturando los highlights del bolo. Pero cuando este gigante del fotoperiodismo musical empezó a hacer sus primeros pinitos, esa profesión ni siquiera existía como tal.
La cosa empezó en el 69, con un amigo del instituto que curraba en una revista underground de Amsterdam y escribía sobre rock. Gijsbert le enseñó una fotografía que hizo a la banda holandesa The Outsiders y se dieron cuenta de que hacían buena pareja. La mayoría de los periódicos de entonces incluían una página juvenil y ambos empezaron a trabajar para uno de ellos. Fue el primer fotógrafo de aquel periódico y trabajó allí durante 6 años. “No hubo un momento exacto en el que supiera podía hacer de esto mi forma de vida, las bandas americanas más potentes estaban con su primer o segundo álbum, girando por Europa y simplemente había mucho trabajo por hacer, lo hacía a la vez que le daba forma a una profesión por entonces desconocida”, recuerda Gijsbert.
En su privilegiado almacén de recuerdos, Hanekroot guarda con especial cariño a aquellos artistas con los que compartió más tiempo de gira: Un tal David Bowie, por ejemplo, al que acompañó de tour durante años. De aquella increíble experiencia publicó su libro “David Bowie: The Seventies”.
El fotógrafo holandés destaca de Bowie su bondad como persona y su inteligencia.
También Mick Jagger; en “From Abba to Zappa” hay una fotografía genial en la que aparece el propio Gijsbert, hecha por Jagger con un pelotón de fotógrafos detrás que estaban ahí para capturar una instantánea del líder de los Stones. “Con Keith Richards me reía mucho, recuerdo cuando le vi por primera vez. Yo acompañaba al periodista que le hacía la entrevista y estábamos muy nerviosos. El tío luego contó en sus memorias que siempre guardaba una pistola debajo de la almohada para las entrevistas incómodas”. También acompañó en varias ocasiones a Lou Reed, a quien dedica el libro que está terminando actualmente y añade entre sus favoritos a Neil Young.
Cuando le pregunto qué es lo que hace una fotografía inmortal, responde que hay dos cosas igual de importantes: El momento y el timing. “No hay un buen momento sin buen timing ni al contrario, también ayuda mucho que la persona a la que fotografíes sea inmortal en sí mismo” Hombre, Gijsbert, está claro que no es lo mismo hacerle una foto a Lou Reed que a nuestro colega de pedo en cualquier garito de mala muerte. No tiene el mismo empaque, eso es así.
En 2017, participó en la exposición “Sleeping With Rockstars” que se hizo en el Hotel Dorado Ibiza Suites, en ella expuso junto al gran Terry O’neill que nos dejó el año pasado y a quien tuvimos el privilegio de entrevistar para el primer número de Stories.
Hemos concretado que, a finales de Agosto le vendría bien pasarse por la Isla y dejarnos su arsenal de fotografías de los Rolling para exponer. Te tomo la palabra, Gijsbert. Y me sigues contando.